Año 2003, Gladys refiriéndose al golpe del 11 de septiembre de 1973:
“No fue la profundidad del programa lo que determinó su derrota. Fue la falta de visión política, la falta de preparación política, ideológica, militar, para prever la reacción de las fuerzas nacionales e internacionales que serían afectadas. No hicimos total confianza en el pueblo, no desarrollamos a fondo la organización, la conciencia en la base para la defensa del poder logrado. No cumplimos con aquello de defender el gobierno con todo. Pero, pese a lo amargo de la derrota la experiencia vivida fue un avance, una demostración que se puede, si se recogen las experiencias de la historia porque nosotros –pueblo de Chile- fuimos derrotados, pero no aplastados en nuestro proyecto, y lo intentaremos cuantas veces sea necesario porque el pueblo tiene que triunfar”.